viernes, 9 de diciembre de 2011

Querido papá Noel:

Quisiera ser más feliz al lado del hombre que elegí para toda mi vida, quisiera que fuéramos esa pareja que pasábamos tan bien, como nenes...

Muchas veces pienso que nunca más recuperaremos ese amor, por que la confianza se perdió, por que me soltó de la mano y jugó a ser como todos los hombres. La verdad que nunca pensé que pasaría esto (por más que diga que nunca pasó nada) no me gusta enterarme, me gustaría que el me cuente quién es, que quiere realmente y por qué oculta tanto?Yo siento que cuando me quiere hacer sentir mal (inconscientemente) es por que jode de alguna manera con otra.

Muchas veces me pregunta si yo lo veo muy abajo y no es así, quizás yo estoy un escalón más arriba. Mejoré mi maternidad, estaba tan en paz, no me hacía problema por nada hasta que todo lo que él conoce siempre de mi, le empezó a RE molestar. Desde que no me gusta cocinar, de que no me interesa comer en la mesa todos juntos, que soy bastante obse con los cuidados de la beba...cuando SIEMPRE fui así (ya le expliqué desde que nos conocimos, que nunca me crié en familia, no había horarios, ni mesa donde comer todos juntos) también si tardo en vestirme, etc. Ahora para el, todas mis actitudes, lo hace poner de MUY mala cara.

Ya no se que hacer, ni pensar...por que no vi todo esto antes? Lo único que pido a papá noel es aquel Federico que me miraba con amor, que me hacía sentir que todo pasa, que juntos podríamos con TODO. Aquel Fede que equivocadamente me hacía sentir la presencia de mi viejo...ya se, me tengo que despertar y vivir la realidad, pero quisiera creer en Santa!

Igual, gracias por mis gordas, que regalo más grande...

2 comentarios:

  1. Yo creo que son etapas, que seguro con amor y esfuerzo todo puede volver a ser como antes. Y ojo, a mi también me joden muchas cosas de H que siempre supe que hizo, pero bueno, ahora me molestan! Te quiero amiga.

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  2. Hola! Leyendo, lo que pienso, quizá, es que podrías probar de comer todos juntos, es algo que quizás para él es importante y no te haría mal a vos, al contrario, quizás los uniría más, porque sentarse a la mesa en familia no es solo el hecho de comer sino de compartir un momento, de charlar, de mirarse a los ojos... A veces sin dejar de ser uno mismo, está bueno ponerse en los pies del otro y ver que quiere, y si no es nada descabellado lo que pide, porqué no intentar? Muchas Suerte! Creo que todas hemos pasado por estas crisis o diferencias, que si las sabemos aprovechar, son súper productivas...beso!

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