Casi siempre no me falla. Me levanté pensando en lo mal que la pasé anoche, fui a un cumpleaños de una amiga que hace años que no veía ni mantenía contacto y por otra que si es re amiga de siempre, fuimos.
Le dije a Papino que no tenía nada de ganas de ir, pero fui y lo pasé pésimo.Ya sabía que la cumpleañera había perdido la vista por su diabetes, estuvimos en la mesa con 3 personas ciegas. Que no se me entienda mal, admiro a la gente que puede sobrellevar esa situación tremenda, pero realmente triste y que te cuenten que para llegar al lugar las caídas en la calle y ver como la camarera del lugar no les da ni bola para atenderlos y ellos esperan a que se acuerden que están sentados allí.
Para terminar la noche, la cumpleañera nos cuenta que le dieron 5 meses de vida, un nudo en el estómago y terminar la noche amargada y levantarme con bronca.
Uno se queja de tantas pelotudeces.
Otra, es que pienso en todo lo que se quejan las abuelas de Tita, más bronca tengo, pensar que el domingo pasado tampoco tenía ganas de pasar el día de la madre con ellas y así me fue...pasar mi día para el orto.
Entrada bajón, no? Ya pasará...